Sigo con mi afición (quizás enfermiza) de repasar la prensa digital a la hora de la siesta. Será por que me produce una grata sensación no saber si lo que estoy leyendo es cierto o producto de mi cerebro anestesiado. Es como cuando te quedas adormilado viendo la televisión y tu cerebro mezcla las voces que provienen del televisor con la ensoñación ligera y te sumerge en una especie de desvarío cercano a lo que sería un viaje producido por las drogas. Me gusta pasear la mirada por la pantalla con los párpados pesados, confundiendo palabras y cambiando el sentido literal de los encabezamientos, hasta encontrar entre los titulares serios, otros que no lo son tanto. Y es que me encanta cazar "serpientes de verano". Para aquellos que desconozcan el término, explicaré que las "serpientes de verano" son noticias irrelevantes o increíbles que publican los diarios durante las vacaciones de verano, cuando la mayor parte de la sociedad está ociosa y no se producen sucesos o noticias relevantes. Y os puedo asegurar que a poco que busquéis, "cazareis" unas cuantas.
Así pues, encuentro de pronto el titular "Un piloto denuncia al gaitero Hevia por insultar a la tripulación en un vuelo de Air Nostrum". Pienso entonces que el gaitero ha intentado amenizar el aterrizaje con una de sus maravillosas melodías que gustan a niños y mayores por igual, y que la gente ha empezado a correr despavorida por el interior de la cabina, intentando inútilmente escapar como peces atrapados en un acuario. Pero parece ser que la cosa ha sido más bien entre el gaitero y un par de colegas, quizás pasados de sidra. A los pocos días me sorprendo al encontrar a Gerard Depardieu en similar situación. Quizás un ataque de envidia del actor y un ansia por superar la hazaña del gran gaitero?. En este caso Depardieu sintió un repentino ataque de "orines" en el momento del despegue del aparato (del aparato de la compañía, no del aparato de Depardieu) y ante la negativa de la azafata a dejarle pasar al retrete por motivos de seguridad (debido al movimiento del despegue puedes dejar el baño hecho unos zorros), el actor se sacó la "churra" y comprobó cuan absorbente es la moqueta de los aviones. Estuvieron quizás Hevia y Depardieu tomando juntos sidra El gaitero en el mismo aeropuerto antes de embarcar con distintos destinos y de ahí sus problemas en pleno vuelo?. Eso no lo aclara ninguna de las noticias. De pronto mi cerebro recupera durante unos segundos el control total y relaciona las consecuencias etílicas de Depardieu con un titular sobre Ernesto de Hannover. Bueno, tampoco es que mi cerebro haya hecho un esfuerzo sobrehumano. Y la noticia tampoco es que sea sorprendente: "Ernesto de Hannover es ingresado en un hospital de Ibiza por una posible pancreatitis". Mira, si le hubiesen ingresado por una hernia discal por doblar el lomo tirando de un picachón pues todavía hubiese tenido su aquel. Por lo que se ve, sufrió un fuerte dolor abdominal y después de descartar que pudiese tratarse de un atasco de pedos, le llevaron al hospital donde le estuvieron haciendo pruebas. Pero aquí no acaba todo. La noticia no pasaría de ser intrascendente si en un titular un poco mas abajo no se anunciase "Sonia Monroy ingresada en un hospital tras su paso por supervivientes" donde se explica que a la gran actriz-cantante-presentadora-bailarina y aspirante al graduado escolar posiblemente tendrán que extirparle la vesícula. Y de nuevo me pregunto. Casualidad?. Habrá tenido envidia Sonia Monroy de Ernesto de Hannover?. Habrán coincidido en algún garito de Marbella la noche anterior y a los dos les habrán dado garrafón?. Esto tampoco lo explica la noticia. Y mi cerebro vuelve a reaccionar y tras ver el nombre de Sonia Monroy, desplaza a mi ojos hacia un titular donde resalta la palabra Sexo. "Sexo en Nueva York tendrá una precuela". Parece ser que se baraja la idea de hacer una precuela de la serie donde se mostrará los inicios de las protagonistas. Es decir, veremos como Carrie y sus amigas en plena adolescencia compra trapos en Bershka, Stradivarius y H&M y toman calimocho en lugar de Cosmopolitan cuando salen los findes pasándoselo chupi guay. Intrigado por el juego al que me somete mi cerebro, vuelvo a la página principal del diario y me dejo llevar. Con la noticia de la precuela de Sexo en Nueva York rondando por mi cabeza, la palabra "deshecho" salta a mis ojos y leo: "Un anciano confunde durante dos años un contenedor para deshechos con el buzón del correo". Parece ser que debido a la similitud de formato, un anciano ingles estuvo dos años metiendo cartas en el contenedor de las caquitas de los perros. Vamos, que estuvo mandando a la mierda a amigos y familiares, hasta que un día una ciudadana le explicó el equívoco a lo que supongo que el anciano señor respondiese con un sentido: Mierda!!!. El anciano había puesto repetidas quejas y sus hijos empezaban a pensar que chocheaba o que era un avaro cuando juraba y perjuraba que les había enviado cheques como regalo de cumpleaños. En lo que no ha tenido reparo ha sido en pedir disculpas a la compañía de correo y retirar la queja que había puesto diciendo que su servicio era una mierda (aunque en parte el anciano señor tuviese razón).
Llegados a este punto decido que ya tengo suficiente e inicio un formateo del disco duro en forma de siesta para borrar de mi mente tanta información inútil, pero mi sueño es inquieto y desasosegado. Sueño que Sonia Monroy esta en un quirófano, el cirujano desenrosca una teta como si fuese un tapón de una botella, mete su mano, hurga en el interior y con cara de satisfacción extrae la vesícula. En la camilla contigua Ernesto de Hannover y Gerard Depardieu luchan a muerte disputándose una botella de alcohol de Romero. Mientras una azafata vestida de Prada anima la escena tocando con una gaita melodías de Hevia y un anciano se afana en introducir una carta entre las piernas de la Monroy. Despierto sobresaltado y empapado en sudor prometíéndome terminar con el insano hábito de ojear la prensa en época estival. Aunque para garantizar mi salud mental creo que debería dejar de ojear la prensa durante todo el año.